El sóleo es un músculo posterior de la pierna que se extiende desde justo debajo de la rodilla hasta el talón. Según algunas investigaciones, la flexión de sóleo puede mantener un metabolismo oxidativo elevado que mejora la regulación de la glucemia sanguínea.
Sedentarismo y alteraciones
El sedentarismo y el consumo de las dietas energéticas actuales pueden favorecer el desarrollo de patologías como la obesidad (resistencia a la insulina) y la diabetes mellitus tipo 2.
Actualmente el número de personas con alteraciones de la glucemia (diabetes y prediabetes) y del peso ha aumentado de forma preocupante, e incluso la edad de aparición de este tipo de trastornos se está adelantando como, por ejemplo, en grupos de edad inferior a 20 años.
Músculo esquelético
El músculo esquelético desempeña un papel importante en el gasto de energía y se caracteriza por su capacidad para contraerse en respuesta a un estímulo del sistema nervioso.
El músculo cardiaco y el músculo esquelético consumen la mayor parte de la energía que proporciona el ATP presente en la fibra muscular. El ATP se sintetiza a partir de ADP y fósforo, para lo cual se necesita energía que puede proceder de: fosfato de creatina, glucógeno y del metabolismo oxidativo.
Glucógeno
La cantidad de fosfocreatina o fosfato de creatina es muy pequeña, por lo que su contribución a la formación de ATP es baja. Esta molécula es utilizada para generar, de forma anaeróbica, ATP a partir del ADP, formando creatinina.
El glucógeno, almacenado en las células musculares, puede usarse directamente como fuente de energía para la contracción muscular o para reconstituir la fosfocreatina. Es la principal fuente de energía del músculo.
¿Qué es el metabolismo oxidativo?
El metabolismo oxidativo es la combinación de sustratos como carbohidratos, grasas y proteínas con oxígeno para liberar ATP aportando el 95% de la energía para mantener el ejercicio muscular.
Es el sistema de energía más complicado y utiliza la glucolisis, el ciclo de krebs y la cadena de transporte de electrones. Cada uno de estos complejos son múltiples cascadas de reacción que resultan en la producción de ATP y energía.
El final de esta cadena es la formación de agua a partir del oxígeno junto con la formación de energía para crear ATP a partir de ADP. Este proceso se denomina fosforilación oxidativa. Durante el ejercicio intenso, más del 90% de la energía se gasta en las células musculares siendo la glucólisis aeróbica es el método más eficiente de producción de energía.
El metabolismo oxidativo es un proceso en que el cuerpo utiliza el oxígeno para quemar metabolitos como la glucosa o las grasas en sangre, dependiente en gran parte de las necesidades energéticas del músculo cuando se está contrayendo.
Vale la pena señalar los estudios que evalúan el metabolismo oxidativo muscular. Estos estudios han investigado los cambios del metabolismo a través de la utilización de músculo, fibras de piel y/o mitocondrias aisladas. Estos estudios son herramientas valiosas para la evaluación de aspectos específicos de la capacidad oxidativa mitocondrial.
En concreto en el año 2002 un grupo de investigadores de la universidad de Houston con el Dr. Hamilton a la cabeza, realizó un innovador descubrimiento que puede cambiar el estilo de vida sedentario, refiriéndose al músculo sóleo de la pantorrilla que puede mejorar el metabolismo oxidativo en el organismo si se activa de forma correcta.
¿Qué es el sóleo?
El sóleo es un músculo posterior de la pierna que se extiende desde justo debajo de la rodilla hasta el talón. El sóleo es un músculo que forma parte del llamado tríceps sural, junto con los gemelos (gastrocnemios).
En cuanto a la región anatómica, se localiza en el plano profundo muscular, por lo que se encuentra cercano a los huesos y también a los gemelos que están situados por encima y son superficiales.
El sóleo tiene su origen en la cabeza del peroné y en la zona interna de la tibia. Posteriormente sus fibras se dirigen verticalmente hacia el tendón de Aquiles para poder insertarse en el calcáneo.
Su función principal es la extensión del pie o la elevación del talón, permitiendo que hagamos acciones tan cotidianas como las de caminar, correr, subir escaleras o ponernos de puntillas.
Activación del metabolismo por el sóleo
Como hemos descrito anteriormente el sedentarismo puede producir abundantes problemas de salud, como sobrepeso y obesidad. Pero el estudio de la universidad de Houston ha descubierto que un sencillo ejercicio asociado al músculo sóleo, reactiva el metabolismo y quema las grasas, incluso estando sentados.
Datos de la investigación
En esta investigación se sugiere que la flexión de sóleo puede mantener un metabolismo oxidativo elevado que mejora la regulación de la glucemia sanguínea, siendo más eficaz que cualquier método actualmente utilizado incluido el ejercicio, la pérdida de peso y el ayuno intermitente.
El músculo soleo es un músculo de contracción lenta que utiliza como fuente de energía fundamentalmente las grasas y la glucosa sanguínea, sin casi participación del glucógeno almacenado en músculo.
Hay que recordar que los músculos esqueléticos utilizan como fuente de energía fundamental el glucógeno muscular almacenado, que en caso de agotamiento utilizará el glucógeno hepático y si finalmente se agota se favorecerá la neoglucogénesis.
En lugar de descomponer el glucógeno, el sóleo puede usar otros tipos de combustibles, como la glucosa y las grasas presente en sangre.
Existe, por tanto, una dependencia del sóleo mucho menor con relación al glucógeno, lo que ayuda a trabajar durante horas sin esfuerzo y sin fatigarse. Hasta donde sabemos, este es el primer ensayo para desarrollar un tipo especializado de actividad contráctil centrada en la optimización de los procesos metabólicos humanos.
Resultados
Los resultados de la investigación fueron concluyentes, siendo un primer avance para prevenir y tratar problemas como la obesidad y la diabetes, porque con la activación del sóleo, se redujeron los niveles de azúcar en sangre en un 52% y la necesidad del cuerpo de insulina en un 60%. También se demostró que los efectos de ejercitar el soleo duraron más de tres horas, mejorando el metabolismo de los lípidos.
En el estudio la flexión del sóleo consistía en:
- Sentarse y apoyar los pies sobre el suelo
- Relajar los músculos
- Elevar posteriormente el talón y dejar que descienda el talón a su lugar.
- Repetir el movimiento durante varios minutos.
Conclusiones
La flexión del sóleo junto con el ayuno son herramientas metabólicas que pueden favorecer el control de colesterol, triglicéridos y la salud cardiovascular. Son necesarios nuevos estudios a la búsqueda de ejercicios musculares como la flexión del soleo que ayuden a controlar o regular el metabolismo.
Referencias
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